Naga Sadow fue un Lord Sith que vivió alrededor de 5,000 ABY. Originario del planeta Ziost y descendiente de los Jedi Oscuros que habían sido expulsados de la República dos mil años antes, creció bajo la tutela de Lord Simus, el cual le instruyó en los caminos de la Fuerza.
Con la muerte del Gran Señor Oscuro de los Sith, Marka Ragnos, su título quedó libre, originando una prolongada lucha dinástica entre dos candidatos: Ludo Kressh y Naga Sadow. Durante el funeral de Ragnos, en Korriban, ambos se enfrentaron en un duelo de espadas Sith que decidiría quién sería el mejor en servir al Imperio como Señor Oscuro.
La lucha fue interrumpida por el propio espíritu de Marka Ragnos, quien advirtió a los contendientes que el futuro del Imperio Sith estaría pronto en peligro. Fue poco después cuando los hermanos Gav y Jori Daragon, exploradores hiperespaciales, aterrizaron en Korriban con intención de establecer contacto comercial con los nativos. Los visitantes fueron rápidamente capturados y enviados a una prisión en la capital del Imperio en Ziost. Allí, Sadow y otros nueve Lores Sith determinaron el destino de los Daragon.
Mientras los exploradores eran trasladados a la fortaleza de Sadow en la luna de Khar Delba, el pupilo del asesinado Lord Simus reunía a los otros Señores Oscuros en Ziost. Pretendiendo dar muestras de estar conmocionado por la muerte de su maestro a manos de las tropas republicanas, Sadow se erige como el nuevo Señor Oscuro de los Sith y promete no desfallecer en una lucha sin tregua contra la República.
Únicamente Ludo Kressh y sus leales se opusieron a esta autoproclamación y trazaron un plan para acabar con Sadow en su fortaleza de Khar Delba. El plan fue infructuoso, ya que el bombardeo orbital de Kressh tuvo como objetivo una edificación señuelo que el Lord Oscuro había preparado para tal eventualidad. Tras caer en la trampa, las fuerzas de Kressh fueron derrotadas y éste fue dado por muerto tras explotar su nave insignia.
LA GRAN GUERRA HIPERESPACIAL (5,000 ABY)
Por su parte, Jori Daragon intentó llegar lo antes posible a Koros (el principal mundo civilizado del núcleo profundo de la galaxia), para alertar a su dirigente, la Emperatriz Teta, y a los Caballeros Jedi de la inminente invasión por parte del Imperio Sith. El intento fue inútil, ya que poco después de la llegada de la exploradora a la capital, la flota de Sadow salió del Hiperespacio y comenzó el ataque contra las fuerzas republicanas.
El Lord Oscuro de los Sith, confinado en su Esfera de Meditación (un velero solar Sith de unos 10 m de diámetro con forma ocular, desde la que Sadow organizaba su flota), generó cuantiosas ilusiones de bestias de guerra y tropas Massassi atacantes para mermar la moral de las tropas de la República y confundir a los Caballeros Jedi.
Las ilusiones fueron interrumpidas cuando Gav Daragon, sabiendo que su hermana ya no corría peligro alguno, disparó desde su crucero a la Esfera de Meditación de su maestro. La batalla se tornó entonces de parte de la República y Sadow se vió obligado a huir a los territorios del Imperio.
Cuando la flota Sith salió del hiperespacio en Korriban, el antiguo enemigo de Sadow, Ludo Kressh, reasignado como Lord Oscuro de los Sith por el Imperio estaba esperandole con un contingente de naves para destruirle. Al poco de comenzar la batalla estelar entre ambas facciones de los Sith, las flota de Koros dirigida por la Emperatriz Teta, a la que se habían sumado más naves de apoyo de otros mundos de la República, surgió del hiperespacio para poner fin a las aspiraciones del Imperio Sith.
El error de Sadow de subestimar a las fuerzas republicanas, sumado a la traición de su aprendiz, le condujo a tomar un único camino posible: El exilio. Pero antes, el Lord Oscuro se cobraría la vida de su eterno rival, Ludo Kressh, eliminándole definitivamente cuando la nave insignia de éste fue arrollada por un crucero leal a Sadow.
En los compases finales de la batalla, Sadow pidió a sus leales Massassi que bloquearan a la flota de la República mientras él, empleando la Fuerza, provocó erupciones masivas en el grupo de soles Denarii próximos, hasta su ignición en forma de violentas novas. La Emperatriz Teta, presumiendo la muerte de Sadow en la explosión, dio por finalizada la batalla y ordenó regresar parte de la flota a Koros. La otra mitad continuó durante los meses siguientes barriendo los mundos del Imperio Sith y acabando con cualquier amenaza.
Dos Lores Sith lograron escapar de la masacre. Uno de ellos fue Sadow, que logró llegar a la cuarta luna de Yavin y pasar sus últimos días transformando a los guerreros Massassi en aberrantes monstruos, por medio de la alquimia Sith. A pesar de los abusos de su Señor, las bestias lo veneraron como un dios y construyeron tempos en la luna en su honor. Sadow logró vislumbrar el futuro y volvió a ver el apogeo del Imperio Sith, pero no sería gracias a él, sino por parte del otro Sith que logró huir y esconderse en las profundidades de la galaxia.
Éste volvería a reconstruir el Imperio y vengar su derrota milenios más tarde, pero de él hablaremos en otra ocasión... cuando Bioware nos entregue las piezas que faltan.
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